La crisis en «la Feliz»

Cruje Mar del Plata

La crisis modelo 2008 parece haber acelerado los tiempos- ¿y la vida?-de los gobiernos y el de Mar del Plata no es la excepción: a cinco meses de asumir el Intendente Pulti, ya no ataja, ni que decir resuelve, ningún problema, ni conflicto.
El fracaso de los viejos aparatos de la UCR y el PJ –aunque reciclados–, demostrado en los sucesivos gobiernos locales, ha llevado a que Pulti, de Acción Marplatense, –una especie de Lula local por su larga trayectoria de intentonas fracasadas, aunque de orígenes ideológicos muy distintos–, finalmente accediera a «La Administración», con el padrinazgo del gran elector Aldrey Iglesias (grupo La Capital).

Pero una cosa es ganar una elección y otra cosa es superar una crisis política, superar la crisis de los viejos aparatos y menos aun resolver los problemas sociales y estructurales de la ciudad. Un ejemplo es que aun no se ha podido aprobar el presupuesto, que reafirma, por otra parte, todas las condonaciones y excepciones de tasas y permisos para los grandes propietarios de la ciudad.
Lo cierto es que hoy por hoy se encuentran abiertos o en desarrollo, numerosos conflictos y nada prevé que se puedan resolver con este Intendente ni en este cuadro de situación,
La demagogia Kirchnerista que hundió a Katz con decenas de anuncios nunca concretados, amenaza con devorarse al “nuevo” intendente.

• El basural, que sigue contaminando por aire y tierra, saturado hasta niveles de explosión, sigue allí, igual que hace 5 meses o 5 años, con sus centenares de recicladores trabajando en condiciones infrahumanas (acá el bluf fue compartido con Alicia K, que construyó un galpón –pomposamente llamado «planta de separación y reciclado»– que costó millonadas y que está de adorno).
  

• La terminal ferroautomotora que ya debiera estar en construcción avanzada, no sale del papel de los diarios
  

• El plan federal de 900 viviendas paralizado con la construcción que ya se empieza a deteriorar sin que hayan terminado una sola casa. Lejos de las 2000 y pico que anunció Kirchner en persona hace más de 2 años.
  

• La industria de la pesca sigue explotando sus 10.000 obreros en negro –más los que están en blanco, otros 8000–, como hace 5 meses o 20 años.
  

• El transporte urbano, ahora concentrado en un par de empresas, los únicos cambios que ha operado es en el cierre de líneas y servicios y ahora va, como en Córdoba, por otro aumento de boleto.
  

• Los hospitales y salitas se caen a pedazos. Ni hablar de las escuelas.
  

Y hay más…

Hoy, los municipales están de paro por salario (piden el blanqueo de una suma en negro y el 20% de recomposición), y se movilizan diariamente de a miles frente al palacio, los trabajadores desocupados se movilizan por trabajo y viviendas para todos, los estatales luchan a pesar de su burocracia, los obreros del pescado se preparan para enfrentar un duro y conflictivo 2º semestre, con un salario cuasi congelado. Los Judiciales están en plan de paros en toda la provincia.

En la industria se desenvuelven otros importantísimos conflictos: los metalúrgicos, los obreros de la carne de Sadowa, los de Peladero de pollos de Toledo. Los textiles se desangran abandonados por una burocracia que sólo garantiza un salario de indigencia, en decenas de talleres.
La inflación y la carestía arrasa con todos lo ingresos fijos, sean salarios, jubilaciones o planes sociales.

Otra manifestación directa de la descomposición de las camarillas políticas tradicionales es la crisis de la Universidad de Mar del Plata. No es un dato menor, pues de allí han salido los últimos Intendentes y medio Concejo Deliberante.
Aquí se reproduce la incapacidad de las camarillas en designar con normalidad un nuevo rector, acosadas por la movilización estudiantil y de los trabajadores no docentes nucleadas en APU, en huelga por el salario –reclaman una suma de $700– y enfrentando estos últimos una tentativa del armado de un sindicato paralelo y amarillo por parte de la Fatun. La asfixia presupuestaria reina acá como en todas las Universidades nacionales.
Se plantea con toda intensidad una campaña por un congreso de trabajadores y estudiantes para discutir una salida obrera y socialista al derrumbe capitalista y un plan de acción para imponerlo.

¿Y dónde están que no se ven… la Cta y la CGT?

Esta pregunta era un cántico de los más entonados en la lucha del pescado del año pasado y cobra más relevancia cada día que pasa.
La CTA en los 90 canalizó un gran proceso de lucha contra la política menemista, que llevó hacia la Alianza vía Frepaso.

Hoy, sin sacar ninguna conclusión de aquella experiencia delarruista, partida en mil pedazos por la crisis del gobierno con «el Campo», pugna por llevar todo conflicto donde actúa (en el pescado o en Toledo) al terreno de su reconocimiento legal por parte del gobierno K. Pero mayoritariamente, sus burócratas no tienen otra aspiración que conservar mediante esos métodos sus propias quintas amenazadas por la oposición en docentes y estatales. Muy lejos están de abrir o aprovechar expectativas en una nueva organización combativa. En la Universidad su papel es directamente carnero con Adum y con docentes.

La CGT da risa, apareció en una movilización de municipales, supuestamente para apoyar. Pero luego en conferencia de prensa aclaró que su rol es de «mediación». Es lógico si se considera que en ese mismo momento su secretario general Trujillo, trajinaba pasillos en Bs. As., junto a Pulti, en busca de dinero para alguno de sus múltiples emprendimientos comunes. Ni hablar de alguna movida de lucha o de solidaridad con alguna de las que hay en curso. Enrolada en las 62 Organizaciones Peronistas, languidece partida en 62 mil pedazos.
El activismo obrero debe reagruparse en forma independiente.

Alejandro Martínez